domingo, 20 de septiembre de 2009

Un día ácido, despeinado, de lluvia en las terrazas:
Las gotas son dudas retando al precipicio,
la vista en el vacío
cayendo
desde el hule blanco.
Observo el movimiento sutil del agua en las aceras.
Ayer la noche estuvo triste.
Los armarios cerrados
y la ventana ausente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario